Cómo elegir el cóctel perfecto
Elegir el cóctel perfecto no tiene por qué ser complicado. Esta guía sencilla te ayudará a encontrar la mezcla ideal

¿Cómo elegir entre tantas bebidas tipo cóctel?
Cuando estás frente a una carta extensa llena de bebidas para cócteles con alcohol, puede parecer difícil decidir. Sin embargo, conocer tus preferencias de sabor, el tipo de ocasión y el destilado que más te gusta puede convertir esta decisión en una experiencia divertida y personalizada.
Ya sea que busques una bebida refrescante para relajarte, un cóctel elegante para una cena especial o una bebida tipo cóctel exótica para celebrar, siempre existe un cóctel ideal para cada momento. Esta guía te ayudará a identificar los factores clave que debes tener en cuenta para tomar la mejor decisión
PASO 1: Conoce Tu Paladar
Conocer tu paladar es el primer paso para elegir un cóctel que no solo te guste, sino que se convierta en una verdadera experiencia sensorial. Así como ocurre con la comida, los cócteles tienen perfiles de sabor únicos que apelan a distintos gustos. Desde notas dulces y frutales hasta matices herbales, amargos o especiados, hay clases de cócteles para cada gusto.
Identificar tus preferencias de sabor te permitirá afinar tu elección y evitar decepciones.
Dulce: Si te atraen los sabores azucarados y afrutados, opta por cócteles que incluyan frutas tropicales o licores cremosos. Ejemplos: Piña Colada, Daiquiri de fresa. Ácido: Para quienes prefieren un toque cítrico y refrescante, los cócteles con limón o lima son ideales. Ejemplos: Margarita, Cosmopolitan Amargo: Si buscas sabores más intensos y complejos, considera cócteles que incorporen bitters. Ejemplos: Negroni, Old Fashioned. Herbal: Los cócteles con hierbas frescas como menta o albahaca ofrecen una experiencia muy refrescante. Ejemplos: Mojito, Gin Basil. Especiado: Para los amantes de sabores exóticos y picantes, los cócteles con jengibre o chile son una excelente elección. Ejemplos: Bloody Mary, Moscow Mule.
PASO 2: Considera la Ocasión
Un buen cóctel no solo debe gustarte: también debe estar en sintonía con el momento. La experiencia de beber es, en gran parte, contextual. ¿Estás celebrando con amigos? ¿Disfrutando de una cena íntima? ¿O simplemente relajándote en casa después de un día largo? El ambiente, la hora del día y hasta el tipo de comida con la que se acompaña influyen directamente en cuál es el cóctel más adecuado.
Elegir tu bebida pensando en la ocasión garantiza una experiencia más armoniosa y placentera.
Aperitivo: Cócteles secos y ligeros son ideales para abrir el apetito. Ejemplo: Tanqueray Dry Martini. Después de cenar: Para finalizar una comida, opta por cócteles digestivos. Ejemplos: Old Fashioned, Manhattan. Celebraciones: Los cócteles espumosos son perfectos para brindar. Ejemplo: French 75. Relajación: Si buscas relajarte, elige cócteles suaves y refrescantes. Ejemplos: Mojito, Piña Colada.
PASO 3: Elige la base alcohólica
La columna vertebral de cualquier cóctel es su destilado principal. Esta elección no solo determina la intensidad del trago, sino que también define gran parte de su carácter, aroma y personalidad. Cada tipo de alcohol tiene un perfil distintivo que combina mejor con ciertos ingredientes y estilos de preparación, por lo que entender sus características te ayudará a tomar decisiones más informadas —y a disfrutar más cada sorbo.
Ya sea que prefieras un cóctel ligero y refrescante o uno robusto y con cuerpo, el tipo de licor base puede transformar completamente la experiencia. Además, al conocer los principales destilados, estarás mejor preparado para explorar nuevas combinaciones y salir de tu zona de confort sin miedo a equivocarte.
Ron: Adecuado para cócteles tropicales y afrutados. Ejemplos: Mojito, Daiquiri. Ginebra: Ideal para cócteles frescos y herbales. Ejemplos: Gin Tonic, Tom Collins. Vodka: Versátil y neutro, se adapta a una amplia variedad de cócteles. Ejemplos: Moscow Mule, Cosmopolitan. Whisky: Proporciona profundidad y complejidad. Ejemplos: Old Fashioned, Whisky Sour. Tequila: Perfecto para cócteles con carácter. Ejemplos: Margarita, Paloma.
La historia jamás contada de los cócteles
Nadie sabe con certeza quién preparó el primer cóctel. David Mayne, experto en historia de bebidas, investiga cómo nacieron estas mezclas y cómo algunos clásicos siguen siendo populares hoy.
La palabra “cóctel” apareció por primera vez en 1806, en The Balance & Columbian Repository de Hudson, Nueva York, y se refería a lo que ahora conocemos como Old Fashioned, una bebida que sigue siendo un favorito.
Pero las mezclas similares ya existían mucho antes. Desde el siglo XVII, colonos americanos y otros disfrutaban bebidas como juleps, flips, sligs, cobblers y el Cock Ale, que forman parte del origen de los cócteles modernos.
Tu cóctel ideal te está esperando
Ahora que conoces los secretos para elegir el cóctel ideal, estás listo para explorar el mundo de los cócteles, desde los clásicos hasta las nuevas creaciones. En The Bar Colombia, queremos que cada experiencia con nuestras marcas sea inolvidable. Descubre nuestra gran variedad de recetas, aprende más sobre mixología, descarga tu propio recetario de cocteles y bebidas y encuentra inspiración con productos de tus marcas preferidas como Old Parr, Tanqueray, Johnnie Walker, Baileys y más.